Observar las pinturas de Judith Eisler es re-enamorarse del Séptimo Arte. Esta austriaca residente en Nueva York representa fotogramas ‘subestimados’ del cine clásico norteamericano con un efecto borroso y brillante. “El cine es una ilusión que aceptamos como una realidad alternativa. Es un dispositivo que puede transformar al espectador y formar nuestra identidad”, destaca Eisler. Su obra distorsionada está impregnada de la fuerza femenina de Romy Schneider, Dorothy Malone o Elizabeth Taylor, una sensación vibrante de movimiento y una intriga cinematográfica que traspasa la pantalla.
↧