En general los estereotipos que se tiene de los habitantes de Los Angeles giran en torno a ser personas superficiales, que cuidan mucho su imagen y adictos a los rayos de sol. Como todo en la vida habrá gente que si y gente no.
Elevemos estos estereotipos a otra dimensión. Vamos a retroceder a los años 80 y paseemos por una de las avenidas comerciales donde el lujo y la extravagancia luce en su mayor esplendor. Acompañados del fotógrafo Anthony Hernández vamos a dar una vuelta por Rodeo Drive.
La carrera del angelino Anthony comenzó realizando fotografías en blanco y negro. Quiso poner un punto de inflexión en su trabajo y se pasó a la fotografía en color. Su libro “Rodeo Drive 1984″ fue su primera obra disparada en color.
Gracias a su trabajo podemos hacernos una idea de la alta sociedad de Los Angeles en los años 80.