A sus 23 años y tras 8 años haciendo fotografía, podemos considerar a Adrian Robos como uno de los mejores fotógrafos documentales del arte callejero en la ciudad de Valencia.
Su trayectoria comenzó de un modo simple. Su primera cámara fue una Yashica Reflex. Preocupado de documentar lo que tenia delante de su objetivo que de la técnica fotográfica, se pasó a las cámaras compactas analógicas de Olympus. Su principal inquietud es el graffiti y su motivación es plasmar y guardar los mejores recuerdos de su día a día.
Al poco tiempo conoció también al fotógrafo Daniel Luengo, juntos formaron “1992” el primer fanzine dedicado al arte callejero que presentaron en Madrid con una fantástica aceptación.
Con una gran actividad en la redes sociales, este fotógrafo valenciano se convierte en nuestra recomendación semanal. Sigue su diario personal en su cuenta de Instagram.