En 1944, un soldado llamado Johnnie Halliburton murió durante la Segunda Guerra Mundial. Cuando sus restos fueron descubiertos en Francia, fue identificado por un reloj que todavía se aferraba a su muñeca, inscrito para él por su hermano pequeño Ray.
Después de la perdida de su hermano, Ray decidió luchar en la guerra y acabar con el trabajo que su hermano empezó. Las tropas alemana le capturaron en una emboscada y fue prisionero durante 6 meses en un campo de trabajo. Finalmente fue liberado con el fin de la guerra por tropas aliadas.
La historia de los hermanos Halliburton se ha mantenido viva durante siete décadas trascendiendo hasta nuestros días. El fotógrafo natural de Austin, Dan Winters ha pasado varias semanas conviviendo con Ray y ha documentado su día a día mientras escuchaba las anécdotas de Ray y su sabiduría sobre la vida.
Un gran trabajo muy sensible que sirve de homenaje a todos los soldado que lucharon en la segunda guerra mundial.
