Sin duda alguna, los fotomatones han sido uno de los mejores inventos en la fotografía. Una simple cabina de fotos colocada en algún rincón de nuestras calles democratizó de alguna manera la fotografía, acercándola a la gente de a pie. Con echar una simple moneda las posibilidades eran infinitas. Hacerte una foto de carné nunca fue tan fácil. Además podías hacer el chorra con tus amigos, retratarte con esa persona especial e inmortalizar ese momento para siempre.
Hoy en día con la nueva era tecnológica poco a poco estas cabinas fotográficas han ido cayendo a un segundo plano, aunque su utilidad ha ido evolucionando a eventos sociales y fiestas.
Si los fotomatones hablaran… No hablan, pero nos cuentan sus historias en forma de instantáneas. Recopilamos algunas de las fotografías más divertidas de los fotomatones antiguos repartidos por las calles de Estados Unidos.