Margaret Bourke-White fue la primera mujer corresponsal de guerra y también la primera fotógrafa en plantilla de la revista LIFE. Documentó batallas de la Segunda Guerra Mundial, en especial la batalla de Stalingrado y la invasión del ejército alemán en la unión soviética.
Su trabajo más duro de asimilar fue documentar la liberación del campo de concentración nazi de Bunchenwald en Abril de 1945. Junto con Auschwitz fue el campo de concentración más importante del imperio alemán. En el albergaban a homosexuales, testigos de Jehová y judíos.
Margaret después del trabajo en Bunchenwald declaró: “Usar una cámara era casi un alivio. Ésta interponía una ligera barrera entre el horror en frente mío y yo misma.”
Avisamos que alguna imágenes pueden herir la sensibilidad.
